El dolor es una experiencia sensorial y emocional desagradable asociada con un daño tisular real o potencial. Entre las estrategias de tratamiento no farmacológicas se incluyen las derivadas de la Musicoterapia. Las técnicas receptivas representan un conjunto de propuestas dentro del campo de la Musicoterapia mediante las cuales las y los usuarios escuchan y responde a la experiencia musical en forma silenciosa, en forma verbal o de alguna otra forma. Específicamente, la musicoterapia vibroacústica consiste en el uso de ondas sinusoidales, rítmicas y pulsadas de baja frecuencia de entre 30 Hz y 120 Hz, mezcladas con música con fines terapéuticos. En los últimos años, se han registrado evidencias que dan cuenta del efecto de la escucha musical en combinación con la estimulación vibrotáctil sobre aspectos psicofisiológicos, por lo que se la puede considerar una alternativa de tratamiento no farmacológico del dolor. El objetivo del presente trabajo es mostrar los antecedentes sobre los mecanismos que subyacen a la reducción de la percepción del dolor, a partir de la escucha musical y de la estimulación vibrotáctil. Aunque escasos hasta el momento, los estudios presentados muestran las potencialidades de la musicoterapia vibroacústica como tratamiento para la reducción de la autopercepción del dolor de las personas. Este trabajo pretende ser una contribución teórica al campo de la Musicoterapia y un punto de partida para pensar investigaciones básicas y aplicas que amplíen la evidencia de los métodos receptivos musicoterapeuticos.
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